Gustavo Grobocopatel estuvo presente en la Fiesta de la Cosecha junto a la estrella mundial Verónica Cangemi y habló con MDZ sobre la cruda realidad que atraviesa la industria agropecuaria en Argentina.
Las últimas semanas se llevaron a cabo diversas movilizaciones organizadas por el sector del campo en reclamo de medidas urgentes por parte del gobierno nacional tendientes a disminuir los efectos de la sequía y las heladas tempranas que pusieron en jaque a cientos de productores. El empresario Gustavo Grobocopatel participó de la Fiesta de la Cosecha junto a la estrella de la música, Verónica Cangemi y fue contundente con sus declaraciones a MDZ.
Gustavo Grobocopatel es un empresario argentino yaccionista del Grupo Los Grobo que se encuentra radicado en Uruguay desde hace 6 años. En diálogo con MDZ se refirió a la importancia que tienen las empresas del sector agropecuario en la sociedad y la necesidad urgente de una resolución por parte de la política a las pérdidas millonarias producto de la sequía que afecta a algunas regiones de nuestro país.
– ¿Cómo evalúa la situación actual de los productores en relación a la sequía?
En todos estos años nunca vi una situación igual. En el caso del trigo la cosecha fue el 50 por ciento de lo esperado cuando usualmente el impacto de una sequía es del 10 o el 20% pero no solamente fue en ese cultivo sino que la soja también sufrió un impacto del 50% y probablemente veamos algo similar en el maíz con un 40%. Es algo nunca visto tanto en cultivos de invierno y verano en todas las regiones…es realmente una catástrofe.
«En el caso de las políticas públicas relacionadas a los productores creo que es una mezcla de desconocimiento, inoperancia, ignorancia y, en este momento, también se le agrega la desconexión con la realidad»
– ¿Cuáles son las dificultades en relación a las políticas públicas que se vienen aplicando?
Las políticas que se vienen aplicando son las mismas desde hace 20 años. Cuando más o menos va bien, de alguna manera se disipa el efecto negativo pero, por ejemplo, el caso de las retenciones es un impuesto al ingreso y no un impuesto a la ganancia, no son neutras y deterioran la relación insumo-producto, la productividad, el uso de fertilizantes, los insumos. Este estancamiento se viene sintiendo desde hace 2 décadas. Este año perdiendo dinero, los productores aún tienen que pagar el impuesto y eso agudiza el problema en lugar de alivianarlo porque aún sacando las retenciones se pierde dinero.
Las empresas quedan más endeudadas porque no tienen capacidad de financiación y probablemente el año que viene muchas no puedan sembrar. Debido a eso, muchos pequeños productores dejarán de serlo y eso agudiza el proceso de concentración en fin…todo al revés de lo que hay que hacer.
– ¿Considera que el conflicto interno que tiene el gobierno nacional influye en las decisiones que se toman?
En el caso de las políticas públicas relacionadas a los productores no creo que sea por eso ya que existían malas políticas públicas aún sin conflictos. Creo que es una mezcla de desconocimiento, inoperancia, ignorancia y, en este momento, también se le agrega la desconexión con la realidad.
-¿Cuáles son sus expectativas para este año electoral?
Es la expectativa que tenemos todos los argentinos de que tengamos un rumbo, una dirección hacia un lugar que nos dé esperanza, que nos permita pensar que vamos a poder progresar, que vamos a vivir con seguridad y tranquilidad, con una economía estable, que uno pueda planificar las cosas y que pueda tener trabajo genuino. El deseo de que el país sea un lugar donde nuestros hijos quieran quedarse y no irse como nos está pasando a todos. El Gobierno que venga va a tener que poner la política al servicio de la gente, no al servicio de la clase política.
Para acceder a los contenidos originales de la nota, ingresar al portal de MDZOL.